Tanto por la intimidad que le dan al interior de nuestro hogar como por el estilo que brindan a nuestra decoración, las persianas son un elemento muy importante en todos los recintos de la casa. De acuerdo a su funcionalidad, vienen en varios estilos y tamaños por lo que conocerlos es una buena forma de saber cómo sacarle provecho a cada uno. Para que puedas hacerlo, en este artículo te traemos una pequeña lista con los tipos de persianas más comunes en el mercado:
Persianas verticales: pueden ser fabricadas en madera, aluminio, PVC o tela. No son muy frecuentes y su nombre responde a la orientación de sus piezas.
Persianas venecianas u horizontales: cuentan con un sistema de rotación de lamas bastante preciso y pueden adaptarse a cada posible concepto de interiores.
Persianas enrollables: cubren tanto ventanas como puertas muy altas. Brindan más intimidad, impiden mejor el paso de los rayos solares, son de un estilo bastante moderno y resultan muy prácticas. Sin embargo, también son las más costosas.
Persianas blackout: tanto el mecanismo con el que funcionan como el material con el que están hechas impiden totalmente el paso de luz. Son perfectas para lugares que dependen de la ausencia de iluminación como los sistemas home cinema.
Persianas plisadas: a pesar de su belleza, los movimientos bruscos las rompen con facilidad y su manejo resulta engorroso, lo que las convierte en la peor decisión para una habitación de niños. Si te gustan prueba instalarlas en otra estancia.
Persianas de papel japonés: la cantidad de luz que deja entrar viene dada por el color, la textura y el gramaje del material. Funcionan sobre los rieles en los que se desplazan las puertas y ventanas. Perfectas para darle un toque chic a tu hogar.