Un gran temor que siempre tiene un dueño de casa es que ocurra alguna avería en la misma. La buena noticia es que siempre existe la posibilidad de evitarlas. Sigue este top de 5 consejos para evitar averías en casa. Y libérate de preocupaciones.
La mejor manera de asegurar que tu casa o apartamento esté siempre en orden es realizando un mantenimiento preventivo. En otras palabras, las reparaciones simples (y más baratas) se hacen incluso antes de que el defecto aparezca.
Existen muchos métodos que no requieren tanto dinero pero sí rapidez, en cuanto a la ejecución, por esta razón aquí podrás encontrar un listado de consejos para evitar averías en casa, que sin lugar a duda te quitarán dolores de cabeza.
TOP de 6 mejores consejos para evitar averías en casa
Imagina si tu refrigerador deja de enfriarse de la nada. Toda la comida se echará a perder en unas horas y tendrás que volverte loco detrás de un técnico o incluso de una caja de espuma de poliestireno y hielo.
En situaciones de emergencia, terminamos contratando servicios caros sin referencias previas, lo que puede generar problemas aún mayores más adelante. Ahora imagina que tomando algunas simples precauciones, este tipo de situación dejará de ocurrir
1. Limpieza de la grifería
Debería ser un hábito de parte de todos, dado que garantiza una higiene máxima, evita pésimos olores, obstrucciones e impide que aparezcan insectos no amigables en el lugar de vida.
Lo verdaderamente aconsejable es asegurarse que la instalación de la grifería se hizo siguiendo de manera correcta los pasos indicados por el desarrollador. Cuando estos no se cumplen como deberían, puede que las tuberías logren trabajar de manera correcta a lo largo de algún tiempo, pero que se dañen antes de tiempo.
Además hay que prestar mucha atención en los instantes en que se escuchen ruidos raros, ya que aunque esto parezca un asunto sin consideración, la verdad es que puede conducir a inconvenientes complejos después.
Aprendemos en la escuela, pero a veces nos olvidamos: el lugar de la basura está en la basura. Por lo tanto, no tire papel higiénico, absorbentes, algodón o bastoncillos de algodón en el inodoro; no tire restos de comida, aceite y grasa en el desagüe de la cocina.
En caso de atascarse, poner 2 cucharadas de polvo de hornear en el desagüe, verter agua hirviendo y esperar a que aparezca la solución efervescente. Luego, sólo hay que limpiar la suciedad que ha sido removida.
2. Evitar el daño eléctrico
Para evitar que los equipos electrónicos y los aparatos domésticos se dañen, compruebe siempre el voltaje de los enchufes y los aparatos. Si tiene aparatos de bivoltaje, recuerde guardarlos con el interruptor de 220w, para que el aparato no se dañe si lo enchufa a una toma de corriente con otro voltaje.
Si empiezan las lluvias y las tormentas eléctricas, desenchufe todos los dispositivos de la toma de corriente para que no se dañen por la sobrecarga o las fluctuaciones de energía. También se recomienda usar estabilizadores de energía, aislantes o UPS para reducir los riesgos.
3. Identificar las fugas
Si tu factura de agua ha alcanzado valores astronómicos incluso después de tanto ahorro, sospeche que hay fugas. Antes de que la situación se complique, generando fugas, por ejemplo, contacte con un profesional de confianza que pueda identificar los puntos de fuga y hacer las reparaciones.
4. El fallo de la calefacción
Si tienes un sistema de calefacción que se avería regularmente, necesitas revisar toda tu instalación. Para ello, debe buscar la ayuda de un profesional competente para beneficiarte de un servicio de calidad.
De la misma manera, si notas un mal funcionamiento de tu radiador, contactar con un ingeniero de calefacción le permitirá resolver rápidamente el problema. Pero antes de su intervención, tú mismo puedes aportar una solución con un poco de conocimiento. Para ayudarte, aquí tienes algunos consejos sencillos a seguir.
- Apaga el suministro principal de agua de la casa para evitar el desperdicio de agua durante la reparación.
- Coloca cubos y fregonas bajo el radiador para evitar mojar la habitación.
- Abre el codo de salida del radiador y deja que el agua corra.
- Cuando termine, levante el codo y vuelva a poner el agua.
5. Reparar una fuga en la caldera en casa
Uno de los problemas más comunes con los que también te encontrarás a menudo es una fuga en la caldera. Esto puede deberse a una presión demasiado baja (o demasiado alta) en las tuberías, una pieza defectuosa, una bomba bloqueada, un tanque de expansión dañado o sellos desgastados.
Lee sobre Cómo restaurar los muebles de tu casa fácilmente
Aquí tiene algunos pasos sencillos para detener la fuga:
- Compruebe el manómetro de agua de su caldera: debe estar entre 1 y 1,5 bares.
- Cierre la válvula de llenado o el suministro de agua principal. Entonces sangra los radiadores para bajar la presión.
- Abre ligeramente la válvula de llenado. Esto le permitirá ajustar la presión correctamente directamente en el manómetro.
6. Resolver un corte de energía en una casa
Para evitar quedarte en la oscuridad y no hacer nada, aquí tienes algunas ideas de cómo puedes resolver el problema tú mismo.
Primero, ve al panel eléctrico para comprobar si el interruptor de circuito ha «volado». Si es así, esto significa que una sobretensión ha disparado el interruptor. Esto también puede deberse a un cortocircuito causado por un cable desnudo o una bombilla defectuosa.
Para ello, debes investigar el dispositivo o la causa de la falla. Si es un aparato, debes repararlo o comprar otro. Por otro lado, si se trata de un cortocircuito causado por cables desnudos o una toma de corriente, debes pedir a un electricista o a tu proveedor de electricidad una solución más eficaz y radical.
Lee más: Mejora tu calidad de vida, cuidando elementos de tu dormitorio
Algunos otros consejos prácticos
Para evitar averías en casa, debes seguir todos los consejos anteriores. Esto no sólo te ayudará a demostrar tu dependencia de los servicios de avería, sino también a ahorrar en los gastos de reparación.
Finalmente, aquí hay algunos consejos más que seguramente serán útiles en algún momento:
- Realiza un mantenimiento regular de tus instalaciones o simplemente firma un contrato de mantenimiento con tu proveedor.
- Cuando salgas de tu casa, tómate el tiempo de apagar todas las luces y cerrar los grifos (como precaución, puedes apagar el suministro principal directamente).
- Si tienes aparatos desgastados, evita usarlos para limitar el riesgo de cortocircuitos.